Comencé el proceso de cambio con mucha ilusión y energía, me sume a la empresa, empecé a capacitarme, a asistir a reuniones, a viajar a eventos, a leer libros que me iban orientando, pese a todo eso seguía sin entender de que se trataba todo este mundo del network marketing, pero debido a que estaba enfocado al 100% en salir adelante iba visualizando momentos y situaciones de la vida cotidiana que antes no le prestaba atención y que eran parte ahora de lo que estaba emprendiendo.

Como es eso? Muy simple, me encontraba con amigos y familiares que algunos se les caía mucho el pelo, otros se sentían cansados del stress de trabajo y así muchas personas que me contaban sus problemas, al igual que yo, lo que nos pasaba.

En esos momentos me di cuenta que estaba presenciando oportunidades para contarles que yo trabajaba en una empresa nueva que tenía un colágeno que iba a solucionarles esos problemas y a otros que tenía una línea de cremas que para la piel era de calidad premium y exclusivas. Así fui haciendo negocios sin tener que esforzarme en trabajar. Estaba feliz de empezar a entender por dónde era el camino.

Pero todo no fue color rosa, había meses que no avanzaba y eso hacía que me entren un poco de dudas y querer abandonar, pero algo dentro mío me decía que siga.

Mas tarde , fin del 2019, hago un viaje hermoso con mis dos mayores, Violeta y Valentina a Londres y Madrid por sus cumpleaños, todo venía marchando súper bien, no tanto como yo quería pero el aprendizaje seguía su camino.

En 2020, cuando el impulso que traía empezaba a caer, llega la pandemia, y ahí pensé que todo se había terminado, que estos años se terminaban acá mismo, encerrado en un campo sin saber cuanto tiempo iba a demorar la solución a las restricciones.

Esto me dio tiempo a pensar y armar una propuesta a mi equipo, reunión online y decidimos probar 10 días a realizar ventas de productos y capacitara a las personas que se animen a emprender en pandemia, parecía imposible pero fue todo mas exponencial el crecimiento que tuvo mi equipo y claramente yo también.

Al comenzar la pandemia éramos cerca de 200 personas en el equipo, abandonaron mas de la mitad por depresión y casi mediados de 2021 llegamos a ser mas de 1600 trabajando.

Un éxito, sin pensarlo, pero estábamos capacitados, habíamos pasado por buenas y malas rachas y la pandemia nos dio tranquilidad, lugar y espacio. 

Además los que no creían que se podía trabajar online también se dieran cuenta que esto tiene un potencial sin límites y que los límites lo pone uno en nuestra mente.